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Las patentes son barreras

Hay un gadget nuevo en la ciudad, se llama Palm Pre y tiene una pinta increíble para los amantes de este tipo de inventos. Apple y su iPhone le han visto las orejas al lobo así que no han dudado lo más mínimo

no nos preocupa la competencia, pero si alguien vulnera nuestra propiedad intelectual, iremos a por ellos.

Pero Palm, perro viejo en este juego tiene clara la respuesta, ya ni siquiera los CEO se mueven en el terreno de lo politicamente correcto y reconocen a las claras que uso dan las grandes compañías a las patentes:

The reason you do that is to have a defensive position. It’s like two little porcupines going around, and you don’t want to touch each other because you might get stung. You peacefully coexist and everything’s OK and you keep working together. We’re very respectful about people’s intellectual property, we believe we’re huge innovators and have been for a lot of years and that this product has an enormous number of innovations in it. If something does happen there, we do have the portfolio, we think to defend ourselves and to be successful doing that. But nothing’s happened to date, so we’re really just focused on getting the product out the door.

En resumen, Palm tiene 1500 patentes en su portafolios y si Apple los denuncia seguro que encuentran alguna que algún producto de Apple incumple.

Este es sólo un ejemplo más del uso real que se hace de las leyes de propiedad intelectual, pero merece especial atención dado que lo habitual es oír a los CEO hablando de como las patentes favorecen la innovación, mientras sus abogados se encargan de usarlas como barrera de entrada a nuevos competidores.

Este artículo está basado en el escrito por Noradrex en su bitácora de Barrapunto.

Un juego

Os propongo un pequeño juego. La explicación del porque en un par de días en el siguiente post.

Mañana voy a comer con un par de ingenieros…

El juego consiste en que os imaginéis la escena y luego respondáis a las siguientes preguntas:

  • ¿Cuantos vamos a ir a comer?
  • ¿Que aspecto tenemos?
  • ¿Que vamos a comer?
  • ¿Cuales son nuestros nombres?

No hace falta que contestéis en los comentarios, aunque podéis hacerlo si queréis, si no que dediquéis un minuto a pensarlo y seáis sinceros cuando miréis el siguiente artículo.

No somos nosotros, es el Banco

Y entonces el inquilino se irguió airado. El abuelo tomó la tierra y tuvo que matar a los indios y expulsarlos de allí. Y el padre nació allí y hubo que quitar malezas y matar culebras. Luego vino un año malo y tuvo que solicitar un pequeño préstamo.

– Y nosotros nacimos aquí. Esos que están a la puerta -¡nuestros hijos! nacieron aquí. Y el padre tuvo que pedir un préstamo. Entonces el Banco poseyó la tierra, pero nosotros seguimos aquí, y logramos una pequeña parte de lo que habíamos cultivado.

-Sabemos eso…, todo eso. No somos nosotros, es el Banco. Un Banco no es como un hombre. Ni un propietario de cincuenta mil acres tampoco es como un hombre. Es el monstruo.

– Cierto -gritaba el inquilino-, pero es nuestra tierra. Nosotros la medimos y la surcamos con nuestros arados. Hemos nacido en ella, nos han matado en ella, hemos muerto en ella. Aunque no sea nuestra, sigue siendo buena. Esos es lo que la hace nuestra…, el haber nacido en ella, trabajado en ella, muerto en ella. Eso es lo que hace la posesión, no un papel con números.

– Lo lamentamos, no es culpa nuestra. Es el monstruo. El Banco no es como un hombre.

– Sí, pero el Banco consta sólo de hombres.

– No; se equivoca en ello… Está en un error. El Banco es algo más que un grupo de hombres. Sucede que todos los hombres de un Banco odian lo que hace el Banco, y sin embargo, el Banco lo hace. Le digo a usted que el Banco es mucho más que un grupo de hombres. Es el monstruo. Los hombres lo hicieron, pero no pueden someterlo.

Los inquilinos gritaron. El abuelo mató a los indios, el padre mató las culebras, en bien de la tierra. «Quizá nosotros podamos matar a los Bancos… Son peores que los indios y las culebras. Quizá tengamos que luchar para conservar nuestra tierra, como lo hicieron el padre y el abuelo.»

Entonces los hombres del propietario se encolerizaron.

– Tendrán que irse.

– Pero es nuestra – gritaron los inquilinos-. Nosotros….

– No , el Banco, el monstruo la posee. Tendrán que irse.

[Las uvas de la ira](http://www.amazon.com/gp/product/0142002534?ie=UTF8&tag=httpconocimie-20&linkCode=as2&camp=1789&creative=390957&creativeASIN=0142002534)![](http://www.assoc-amazon.com/e/ir?t=httpconocimie-20&l=as2&o=1&a=0142002534) John Steinbeck. Editorial Planeta. Edición de 1966. Página 44.

Apagar el ordenador cuando finaliza una peli

Si eres de los que se llevan el portátil a la habitación para ver una película o el último episodio de tu serie favorita este artículo te interesa. Con la ayuda de la gente de espaciolinux he escrito un script para linux que hace que el ordenador se apague automáticamente unos segundos después de que finaliza la película que estás viendo.

Por ahora sólo funciona con el escritorio KDE 3.5 o inferior, y el reproductor kaffeine, aunque si alguien está interesado que deje un comentario y vemos como arreglarlo. El script es el siguiente:

#!/bin/sh<br></br><br></br># apaga_pelis.sh  v0.2. 2008/12/29<br></br># Francisco Puga. http://conocimientoabierto.es<br></br># Author makes devolution of this code to Public Domain<br></br><br></br># Sólo funciona con dcop (KDE 3.5 o inferior) y el reproductor kaffeine<br></br><br></br># Lanza la pelicula deseada, calcula su duración y se duerme a la espera<br></br># de que pase ese tiempo. Cuando se despierta calcula si la película ya ha<br></br># finalizado (por si ha habido pausas) y si no vuelve a dormirse.<br></br><br></br>kaffeine -f $1<br></br><br></br>#Calculamos la duracion y le sumamos 30s para que no apague justo despues<br></br>DURACION=$(expr $(dcop kaffeine KaffeineIface getLength) + 60)<br></br>sleep $DURACION<br></br><br></br>while [ $(dcop kaffeine KaffeineIface isPlaying) == "true" ]; do<br></br><br></br>  RESTA=$(expr $DURACION - $(dcop kaffeine KaffeineIface getTimePos))<br></br>  sleep $RESTA<br></br>done<br></br><br></br>dcop kaffeine KaffeineIface quit<br></br>dcop ksmserver ksmserver logout 0 2 2


Lo único que teneis que hacer es copiar el texto anterior en un archivo de texto y guardarlo en algún sitio de vuestro disco duro. Luego pulsais con el botón derecho sobre él, vais a propiedades -> permisos y marcais la casilla «es ejecutable«.

A continuación pulsais con el botón derecho sobre algún archivo que querais reproducir, propiedades, y luego pulsamos sobre el icono que se ve en la imagen. En la siguiente pantalla le damos a «añadir» y seleccionamos el archivo que contiene el script.


Aceptamos y cuando esté agregado, lo seleccionamos y le damos a «bajar». El primer programa de la lista es con el que se abrirá ese tipo de archivo cuando hagamos doble click sobre él. El resto son accesibles desde el menú abrir con que se despliega cuando pulsamos con el botón derecho sobre el archivo.

Es decir, a partir de este momento cuando queramos que el ordenador se apague tras finalizar la película, debemos pulsar con el botón derecho sobre el archivo, vamos a abrir con y allí seleccionamos nuestro script.